Ser el foco de una pelea muy prolongada entre cónyuges que están pasando por un divorcio, por lo que es crucial estar armado con conocimiento y retener el consejo legal de abogados experimentados.
Reglas básicas para la división de bienes
Florida es un estado de distribución equitativa, lo que significa que el tribunal se esfuerza por una distribución igualitaria de los bienes y activos de la pareja. El juez tiene la discreción para otorgar una distribución desigual de los bienes según los factores específicos del caso ante él. Estos factores incluyen:
La manera en que cada cónyuge contribuyó al matrimonio, incluido el mantenimiento del hogar y el cuidado y educación de los hijos por parte de un cónyuge que se quedaba en casa.
La posición financiera de cada una de las partes, incluida la capacidad de ingresos futuros.
La duración del matrimonio.
Cualquier sacrificio que uno haya hecho por el matrimonio o en beneficio de su cónyuge, como poner en espera una carrera profesional o renunciar a oportunidades educativas.
Cómo un cónyuge apoyó a su pareja para lograr el éxito personal, educativo y profesional.
La naturaleza de un activo o propiedad en particular y si hay algún beneficio en mantenerlo intacto y libre de reclamaciones, como un interés comercial, una práctica profesional o una corporación.
La contribución personal de cada cónyuge a la producción de ingresos y adquisición o mejora de un activo, ya sea que la propiedad sea marital o no marital.
El impacto personal de cada cónyuge en la adquisición de deudas y otras responsabilidades en activos matrimoniales y no matrimoniales.
La importancia de que una de las partes retenga la posesión de la residencia conyugal, ya sea en beneficio de un hijo menor o dependiente o de la parte que se quedaría con el hogar. Esto solo se considera si es financieramente posible retener la casa hasta que el hijo haya alcanzado la mayoría de edad o hasta que una de las partes pueda hacerse responsable exclusivamente de la residencia.
Si una o ambas partes actuaron consciente o imprudentemente para disipar, malgastar o destruir activos matrimoniales después de presentar la Petición de Disolución del Matrimonio. También se aplica una disposición de revisión de dos años bajo la premisa de que una de las partes podría haber anticipado la presentación legal; y
Una revisión de cualquier otro factor que pueda ser necesario para lograr justicia y equidad para cada una de las partes.
(Ver Estatutos de Florida, Título VI – Práctica Civil y Procedimiento, Capítulo 61).
Cuando un tribunal busca asegurar la equidad entre las partes, el juez también considerará los pagos de manutención infantil, el Plan de Crianza y el acuerdo de tiempo compartido entre los padres, cualquier pensión que se otorgue y la responsabilidad de una de las partes en la adquisición de deudas y otras responsabilidades durante el matrimonio.
Tipos de bienes para dividir
Además de los bienes típicos, como una casa, automóviles, barco, muebles, ropa y joyas, obras de arte, cuentas de ahorro e inversiones, y equipos, otros activos están sujetos a distribución equitativa. Esto incluye todos los derechos, intereses, fondos y beneficios adquiridos y no adquiridos relacionados con:
Cuentas de jubilación;
Planes de reparto de beneficios;
Planes de compensación diferida; y
Planes y programas de seguro.
Propiedad no marital
Cuando un tribunal busca distribuir bienes, se realizan ciertas determinaciones al principio. No todos los activos se consideran bienes matrimoniales. Todos los bienes adquiridos por una de las partes antes del matrimonio generalmente se consideran no matrimoniales, también conocidos como separados. Además, un cónyuge que recibe una herencia o un regalo personal durante el matrimonio puede excluirlo del patrimonio conyugal. Las partes también pueden tener bienes no matrimoniales creados a través de lo siguiente:
Un acuerdo separado que es un documento válido que define activos y deudas específicas como no matrimoniales. Un ejemplo de esto es un acuerdo prenupcial o premarital.
Los ingresos generados por bienes no matrimoniales.
Artículos que se compraron o intercambiaron por bienes no matrimoniales. Un cónyuge que recibe una herencia y compra un Corvette Stingray 1967 con esos fondos heredados puede mantener el automóvil fuera de los bienes a dividir entre los cónyuges.
La designación de propiedad no marital o separada puede ser complicada cuando ha habido una mezcla de activos durante el matrimonio, lo que hace imposible para el tribunal hacer una determinación clara de bienes matrimoniales y no matrimoniales. En ese caso, el tribunal puede simplemente decidir que el patrimonio combinado se ha convertido en un activo matrimonial. Aunque un tribunal puede considerar si uno de los cónyuges cometió adulterio al determinar la pensión alimenticia, lo mismo no se aplica al examinar la distribución equitativa de bienes. La única vez que esto puede influir en los cálculos del tribunal es cuando el adulterio ha resultado en la disminución de los bienes matrimoniales.
División igual o desigual
La premisa subyacente en la distribución de bienes es que sea equitativa; sin embargo, esto no siempre significa igual. Cuando se presenta una Petición de Disolución del Matrimonio ante el tribunal, incluye una demanda general para la distribución equitativa de bienes según la Estatuto de Florida 61.075. Después de hacer la solicitud general, una de las partes puede solicitar específicamente una distribución desigual de los activos basada en ciertos factores. Estas justificaciones para la inequidad deben ser demostradas mediante la presentación de pruebas durante el proceso de descubrimiento. Dado que el juez tiene cierta discreción y la capacidad de evaluar subjetivamente la evidencia presentada, hay ocasiones en las que la distribución de bienes sorprende a las partes.
Cuando un matrimonio termina, las partes en el divorcio experimentan muchas emociones diferentes. Es difícil pasar por alto estos sentimientos de dolor y devastación por la destrucción de una relación que se suponía que duraría hasta la muerte. Sin embargo, mantener el enfoque en la distribución de los bienes conyugales y apoyarse en evidencias claras e imparciales para excluir los bienes no matrimoniales y argumentar por una división desigual basada en factores relevantes permitirá a un cónyuge alejarse en la mejor posición posible.
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